La eficacia de la aspirina para la prevención secundaria de la enfermedad cardiovascular aterosclerótica (ASCVD) ha sido bien establecida tanto en hombres como en mujeres; sin embargo, la evidencia sobre el uso de aspirina para la prevención primaria ha sido controvertida.
En 2022, el Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos de EE. UU. (US Preventive Services Task Force, USPSTF) publicó nuevas recomendaciones que desaconsejan el uso de aspirina para la prevención primaria de ASCVD en adultos de 60 años o más (grado D; no se recomienda iniciar), sin diferencias en el efecto del tratamiento o orientación por sexo.
Para la prevención primaria en personas de 40 a 59 años de edad que tienen un riesgo estimado de ASCVD a 10 años de al menos 10 % según las ecuaciones de cohortes agrupadas del American College of Cardiology/American Heart Association, se dio una recomendación de grado C, lo que indica que hay al menos certeza mínima de que el beneficio neto en este grupo es pequeño y la toma de decisiones compartida debe considerarse caso por caso.
Bibliografía: JAMA